Círculo Amawtico
SABIDURÍA ANCESTRAL
¡ÚNETE A LA TRIBU!
«Todo el Universo está en permanente comunicación, en diálogo activo y constante, sólo los seres humanos hemos olvidado el lenguaje universal, nuesta mente no para de hablar, entra en el «parloteo» constante.»
«Los Rituales, las Ceremonias, las Ofrendas, son actos-puente, de conexión, de Común- Unión, de co-Existencias en Armonía y Unidad con el TODO, con lo Sagrado, con el UNIVERSO.»
Necesitamos recordar, empoderarnos, volver a recuperar los ritos, ceremonias, forma de ofrendar y hacer de nuestra vida un acto Ritual constante, de unión con la Pachamama, con el Universo y con la Vida.
Warawara Neila Marquina
WILUMI – Sacerdotisa de la Pachamama, la Luna y el Sol.
HISTORIA ANCESTRAL DE LA SABIDURÍA DE LOS CUATRO ELEMENTOS:
En todos los pueblos del mundo, los 4 Elementos son y han sido venerados como elementos Sagrados, desde nuestros Ancestros más antiguos nos viene toda la sabiduría de los elementos o elementales del Fuego, del Agua, del Aire y de la Tierra.
«Cuando hablamos desde la cosmovisión andina, desde el Amawtismo de los elementos, estamos hablando del Origen de todo lo que existe, de todo lo que es, de todo lo que nos une a la Madre Tierra y al Cosmos.»
Porque sabemos que estos cuatro elementos que pueden parecer muy básicos muy simples en realidad son los más antiguos, son los abuelos que nos protegen, que nos guían, son Awichas, Apus y Achachilas, los guardianes de una sabiduría milenaria que ha acompañado por millones de años la misma creación de lo que conocemos.
Para nosotros los Amawtas, estos espíritus antiguos son protectores Ancestrales, son divinidades que tienen memoria, que constituyen todo un linaje sagrado de seres que pertenecen a estos elementos.
Ellos saben todo lo que hemos vivido, no solamente como seres humanos, sino como raza planetaria. En todas las culturas siempre ha habido una relación de conexión muy profunda con cada elemento esencial. En los andes, aún los abuelos conservan esa sabiduría, saben cómo hablar con cada elemento, saben cómo dirigirse a cada espíritu, comprenden el lenguaje del viento, del agua, del fuego, de la tierra y por esto siempre nos dicen que ese es el camino por el que debemos comenzar.
Por este motivo, para iniciar nuestro camino rojo de conexión con la Pachamamita, ponemos en nuestro altar solo lo esencial. La relación con cada elemento sagrado, es también una relación con nosotras mismas, con nuestro propio cuerpo, pues estos elementos nos conforman, son la base sobre lo que toda la creación ha sido realizada. Somos tierra, agua, aire y fuego. Por esto es por lo que somos Sagrados.
Cuando una Mujer Medicina, comienza su relación con cada elemento, está volviendo a recoger la memoria primigenia que guardan estos seres elementales, el fuego, el agua, la tierra, el aire, tienen MEMORIA, y ellos han estado presentes desde el inicio de los tiempos, nos conocen, como han conocido a los primeros seres humanos que han pisado la tierra y a todas las razas anteriores que han estado en este hermoso planeta. Cada elemento, por esto mismo, es un abuelo, una Awicha, un Achachila, un Aphu, un ser conformado de muchos seres (elementales) y que a lo largo del tiempo ha tenido más o menos relación con los seres humanos. Trabajaremos con las cuatro abuelas/os, con los cuatro elementos que son abuelos y abuelas, Espíritus muy antiguos, seres primigenios que forman parte de la Madre Tierra, son como los ancestros de nuestros ancestros que están presentes en toda la faz de la Tierra. Cada uno de ellos son símbolos de sabiduría, de conexión y que nos permiten conectar con lo originario, lo primigenio que habita dentro de nosotros.
¡Jallalla!
Warawara Neila Marquina
WILUMI – Sacerdota de la Pachamama, la Luna y el Sol.
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¡Jallalla hermanitxs del Alma!
